El cocinar deficiente es un pecado
Es un pecado poner alimento pobremente preparado sobre la mesa, porque el comer concierne al bienestar de todo el organismo. El Señor desea que su pueblo aprecie la necesidad de cocinar los alimentos de tal manera que no agríen el estómago, y en consecuencia agríen el temperamento. Recordemos que hay religión práctica en un buen pan.EL CONOCIMIENTO DEL ARTE DE COCINAR VALE DIEZ TALENTOS
No se considere la tarea de cocinar como una forma de esclavitud. ¿Qué acontecería con los que habitan en este mundo si todos los que están ocupados en la tarea de cocinar abandonaran su trabajo con la débil excusa de que no es suficientemente digno? El cocinar puede considerarse menos deseable que algunos otros ramos de trabajo, pero en realidad es una ciencia con un valor superior al de todas las otras ciencias. Así considera Dios la preparación de alimentos saludables. El tiene en alta estima a las personas que realizan un servicio fiel en la preparación de alimentos saludables y ricos al paladar. Quien entienda el arte de la correcta preparación de los alimentos, y use este conocimiento, es digno de un mayor encomio que los que se ocupan en cualquier otro ramo de trabajo. Debe considerarse que este talento equivale a diez talentos; porque su debido uso tiene mucho que ver con la salud del organismo humano. Debido a que está tan inseparablemente relacionado con la vida y la salud, es el más valioso de todos los dones.El respeto que merece quien cocina
Yo aprecio a mi costurera y a mi copista; pero mi cocinera, que sabe preparar el alimento que sostiene la vida y nutre el cerebro, los huesos y los músculos, ocupa el puesto más importante entre los ayudantes de mi familia.Es el deber de toda mujer llegar a ser una cocinera capaz
Con frecuencia nuestras hermanas no saben cocinar. A las tales quiero decirles: Yo iría a la mejor cocinera que se pudiera hallar en el país, y permanecería a su lado si fuese necesario durante semanas, hasta llegar a dominar el arte de preparar los alimentos, y ser una cocinera inteligente y hábil. Obraría así aunque tuviese cuarenta años de edad. Es vuestro deber saber cocinar, y lo es también el enseñar a vuestras hijas a cocinar. Cuando les enseñáis el arte culinario, edificáis en derredor de ellas una barrera que las guardará de la insensatez y el vicio que de otra manera podrían tentarlas.Aprendan a cocinar los hombres y las mujeres
Muchos que adoptan la reforma pro salud se quejan de que no les conviene. Pero después de sentarme en sus mesas llego a la conclusión de que la falta no está en la reforma pro salud, sino en los alimentos pobremente preparados. Hago un llamado a los hombres y las mujeres a quienes Dios ha dado inteligencia: Aprended a cocinar. No hago ningún error cuando hablo a los "hombres", porque ellos, tanto como las mujeres, necesitan comprender la preparación sencilla y saludable de alimentos. A menudo sus trabajos los obligan a ir a donde no pueden obtener alimentos saludables. Pueden necesitar permanecer días y aun semanas como huéspedes de familias que son completamente ignorantes a este respecto. Entonces, si ellos tienen el conocimiento, pueden usarlo para un buen propósito.Hay que estudiar las revistas de salud
Los que no saben cocinar de acuerdo con los principios de la higiene deben aprender a combinar artículos alimenticios sanos y nutritivos de tal manera que hagan platos apetitosos. Suscríbanse a nuestras revistas de salud los que desean obtener este tipo de conocimiento. Hallarán información adecuada en ellas...Estimúlese el desarrollo del talento individual
El Señor quiere que en todo lugar se estimule a hombres y mujeres a desarrollar sus talentos en la preparación de alimentos sanos con los productos naturales de su propia región. Si miran a Dios y ejercen su habilidad e ingenio bajo la dirección de su Espíritu, aprenderán a transformar los productos naturales en alimentos sanos. Así podrán enseñar a los pobres a proveerse de alimentos que reemplacen la carne. A su vez los que reciban esta ayuda podrán instruir a otros. Una obra tal se ha de hacer todavía con celo y vigor consagrados. Si se hubiese hecho antes, habría hoy muchas más personas en la verdad, y muchos más instructores. Aprendamos cuál es nuestro deber, y luego hagámoslo. No debemos ser incapaces ni depender de otros para que hagan la obra que Dios nos ha confiado.Un llamado a establecer escuelas de cocina
En relación con nuestros sanatorios y escuelas, debe haber escuelas para enseñar el arte de cocinar, donde se dé instrucción sobre la debida preparación de los alimentos. En todas nuestras escuelas debe haber personas capacitadas para educar a los estudiantes, tanto jóvenes como señoritas, en el arte de cocinar. Particularmente las mujeres deben aprender a cocinar.La reforma pro salud y la buena cocina
La razón por la cual muchos se han desanimado al poner en práctica la reforma pro salud es que no han aprendido cómo cocinar de tal manera que los alimentos adecuados, preparados con sencillez, reemplacen el régimen al cual han estado acostumbrados. Se disgustan con los platos pobremente preparados, y lo próximo que se oye es que dicen que han probado la reforma pro salud, y no pueden vivir de esa manera. Muchos tratan de poner en práctica informaciones escasas con respecto a la reforma pro salud, y hacen un trabajo tan malo que perjudica la digestión, y desanima con respecto a todo lo que tiene que ver con la tentativa. Profesáis ser reformadores en materia de salud, y por esta precisa razón debéis convertiros en buenos cocineros. Los que pueden aprovechar las ventajas de escuelas de cocina debidamente dirigidas e higiénicas, hallarán que esto les resulta de gran beneficio, tanto para sí mismos como al enseñar a los demás.El cambio de un régimen a base de carne
Os aconsejamos que cambiéis vuestros hábitos de vida; pero al mismo tiempo os recomendamos que lo hagáis con entendimiento. Conozco familias que han cambiado de un régimen a base de carne a otro deficiente. Su alimento está tan mal preparado que repugna al estómago; y estas personas me han dicho que la reforma pro salud no les asienta, pues están perdiendo su fuerza física. Esta es una razón por la cual algunos no han tenido éxito en sus esfuerzos para simplificar su alimentación. Siguen un régimen pobre. Preparan sus alimentos sin esmero ni variación. No debe haber muchas clases de alimentos en una comida, pero cada comida no debe estar compuesta invariablemente de las mismas clases de alimentos. El alimento debe prepararse con sencillez, aunque en forma esmerada para que incite al apetito. Debéis eliminar la grasa de vuestra alimentación. Contamina cualquier alimento que preparéis.Comed mayormente frutas y verduras
La debida preparación de los alimentos es uno de los trabajos más importantes. Especialmente donde la carne no constituye el principal artículo de la alimentación, la buena preparación de los alimentos es un requisito esencial. Algo debe prepararse para ocupar el lugar de la carne, y estos sustitutos deben estar bien preparados, de tal manera que no se desee la carne.La forma pobre de cocinar es una causa de enfermedad
Por falta de conocimiento y habilidad con respecto al arte de cocinar, más de una esposa y madre diariamente coloca delante de su familia alimentos pobremente preparados, que en forma continua y segura están perjudicando los órganos digestivos y produciendo sangre de mala calidad; el resultado es frecuentes ataques de enfermedad inflamatoria, y a veces la muerte. . .Epitafios apropiados
El alimento escaso y mal cocido vicia la sangre, pues debilita los órganos que la producen. Desarregla el organismo y causa enfermedades acompañadas de nerviosidad y mal humor. Cuéntanse hoy día por miles y decenas de millares las víctimas de la cocina defectuosa. Sobre muchas tumbas podrían escribirse epitafios como éstos: "Muerto por culpa de la mala cocina". "Muerto de resultas de un estómago estragado por el abuso".ALMAS PERDIDAS POR LA MALA MANERA DE COCINAR
Es un deber sagrado para las personas que cocinan aprender a preparar comidas sanas. Muchas almas se pierden como resultado de los alimentos mal preparados. Se necesita pensar mucho y tener mucho cuidado para hacer buen pan; pero en un pan bien hecho hay más religión de lo que muchos se figuran. Son muy pocas las cocineras realmente buenas, Las jóvenes piensan que cocinar y hacer otras tareas de la casa es trabajo servil; y por lo tanto, muchas que se casan y deben atender a una familia tienen muy poca idea de los deberes que incumben a la esposa y madre.NO ES UNA CIENCIA INFERIOR
La ciencia culinaria no es una ciencia despreciable, sino una de las más importantes de la vida práctica. Es una ciencia que toda mujer debería aprender, y que debería ser enseñada en forma provechosa a las clases pobres. Preparar manjares apetitosos, al par que sencillos y nutritivos, requiere habilidad pero puede hacerse. Las cocineras deberían saber preparar manjares sencillos en forma saludable, y de tal manera que resulten sabrosos precisamente por su sencillez.Estúdiese la economía
En todo ramo del arte de cocinar debe considerarse esta pregunta: "¿Cómo se preparará el alimento de la manera más natural y económica?" Y debe haber cuidadoso estudio para que la comida que sobra en la mesa no se desperdicie. Estudiad cómo lograrlo, para que de alguna manera estos restos no se pierdan. Esta habilidad, economía y discernimiento son una fortuna. En los días más calurosos de la estación, preparad menos alimentos. Usad más sustancia seca. Hay muchas familias pobres que, aunque tienen apenas lo suficiente para comer, pueden a menudo ser iluminadas en cuanto a por qué están pobres; hay tantas jotas y tildes desperdiciadas.Vidas sacrificadas por comer a la moda
Para muchas personas, el objeto absorbente de la vida -lo que justifica cualquier cantidad de trabajo- es aparecer a la última moda. La educación, la salud y la comodidad son sacrificadas en el altar de la moda. Aun en los arreglos que se hacen en la mesa, la moda y la ostentación ejercen su funesta influencia. La preparación saludable de alimento llega a ser un asunto secundario. El servir gran variedad de platos absorbe tiempo, dinero y trabajo agobiador, sin realizar ningún bien. Puede estar a la moda tener media docena de platos en una comida, pero la costumbre es ruinosa para la salud. Es una moda que los hombres y las mujeres sensatos deben condenar, tanto por precepto como por ejemplo. Tened un poco de consideración por la vida de vuestra cocinera. "¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?"La selección y preparación de los alimentos es importante
La gran cantidad de trabajo hecho para cocinar no es necesaria de manera alguna. Ni debiera haber un régimen muy pobre en calidad o cantidad.El desayuno estereotipado
Yo pagaría un precio más alto por una cocinera que por cualquiera otra parte de mi trabajo... Si tal persona no tiene aptitud y habilidad para cocinar, veréis, como nosotros hemos visto en nuestra experiencia, el desayuno estereotipado, que consiste en gachas... pan de panadería y alguna clase de compota, y esto es todo con la excepción de un poco de leche. Ahora bien, los que comen de esta manera durante meses, sabiendo lo que aparecerá delante de ellos en cada comida, llegan a temer la hora que debería ser interesante para ellos, como el momento más temible del día. Supongo que no podréis entender esto hasta que no lo hayáis experimentado. Pero este asunto me tiene verdaderamente perpleja. Si yo tuviera que participar en los preparativos al llegar a este lugar, diría: Dadme una cocinera experimentada, que tenga alguna facultad inventiva, para preparar platos sencillos de manera saludable, y que no disgusten el apetito.Estudiad y practicad
Muchos no creen que esto [el cocinar] sea un deber, y por lo tanto no tratan de preparar debidamente los alimentos. Esto puede realizarse de una manera sencilla, saludable y fácil, sin el uso de grasa de cerdo, mantequilla o carne. La habilidad tiene que unirse con la sencillez. Para hacerlo, las mujeres deben leer, y luego tratar de poner en práctica con paciencia lo que han leído. Muchos están sufriendo porque ellas no se toman el trabajo de hacerlo. Digo a las tales: Es tiempo de que despiertes sus dormidas energías y lean. Aprendan a cocinar con sencillez, y sin embargo de manera tal que los alimentos sean muy sabrosos y saludables.UNA RAMA IMPORTANTE DE LA EDUCACIÓN
Constituye un deber religioso para los que cocinan aprender a preparar alimento saludable de diferentes maneras, de tal suerte que sea consumido con placer. Las madres deben enseñar a sus hijas cómo cocinar. ¿Qué rama de la educación de una joven puede ser tan importante como ésta? El comer tiene que ver con la vida. El alimento insuficiente, empobrecido y mal cocinado está constantemente corrompiendo la corriente sanguínea, al debilitar los órganos productores de sangre. Es muy esencial que el arte culinario sea considerado una de las ramas más importantes de la educación. Hay solamente pocas buenas cocineras. Las jóvenes consideran que es descender a un trabajo servil el ser cocinera. Este no es el caso. Ellas no tienen el debido concepto sobre el tema ni lo ven desde el punto de vista apropiado. El conocimiento de cómo preparar alimento saludable, especialmente pan, no es una ciencia inferior...ANIMAD A LOS QUE APRENDEN
Es un deber religioso que toda señorita y mujer cristiana aprenda sin dilación a hacer un pan bueno, dulce y liviano de harina de trigo sin cernir. Las madres deben llevar a sus hijas a la cocina consigo cuando son muy jóvenes, y enseñarles el arte de cocinar. La madre no puede esperar que sus hijas comprendan los misterios de los trabajos de la casa sin educación. Debe instruirlas con paciencia, y con amor, y debe hacer que el trabajo sea lo más agradable posible por medio de un rostro alegre y animadoras palabras de aprobación. Si fracasan una vez, dos o tres, no las censuréis. El desánimo ya está haciendo su trabajo, y tentándolas a decir: "No vale la pena; no lo puedo hacer". Este no es el tiempo de censurar. La voluntad está debilitándose. Necesita el acicate que significan las palabras animadoras, jubilosas, llenas de esperanza, tales como: "No te preocupes por los errores que cometiste. Estás solamente aprendiendo, y puedes esperar hacer errores. Pruébalo de nuevo. Pon tu mente en lo que estás haciendo. Sé muy cuidadosa, y seguramente tendrás éxito".Son más esenciales las lecciones sobre arte culinario que sobre música
Algunos son llamados a hacer lo que se considera como deberes humildes: podría ser el cocinar. Pero la ciencia culinaria no es un asunto de poca importancia. La preparación habilidosa de los alimentos es una de las artes más esenciales, que está por encima de la enseñanza de la música o de la costura. Con esto no quiero decir que debamos descartar la enseñanza de la música o la confección de vestidos, pues son esenciales. Pero aún más importante es el arte de preparar alimentos en forma saludable y apetitosa. Este arte debe ser considerado como el más valioso de todos, porque se halla tan estrechamente relacionado con la vida. Debe recibir más atención, pues para producir buena sangre, el sistema necesita buen alimento. El fundamento de aquello que conserva a la gente con salud es la obra misionera-médica del buen arte culinario.Enseñad los misterios del arte culinario
No dejéis de enseñar a vuestras hijas a cocinar. Al hacerlo, les impartís principios que deben tener en su educación religiosa. Al dar a vuestros hijos lecciones de fisiología, y enseñarles a cocinar con sencillez y sin embargo con habilidad, estáis echando el fundamento de los ramos más útiles de la educación. Se necesita habilidad para hacer un pan bueno y liviano. Hay religión en la buena cocina, y yo pongo en duda la religión de las personas que son demasiado ignorantes y demasiado descuidadas para aprender a cocinar...