El Ministerio Pastoral

Capítulo 18

Crear conciencia entre la comunidad

Nota del compilador: Siendo que el libro Evangelismo ha cubierto ya afondo el tema, esta sección a propósito ha sido más limitada que lo que su importancia requiere.

Cristo empleó varios métodos para lograr la atención de las multitudes--De los métodos de trabajo de Cristo debemos aprender muchas lecciones valiosas. El no siguió solo un método; en diversas formas procuró captar la atención de las multitudes, y habiendo tenido éxito en eso, les proclamó las verdades del Evangelio. Su obra principal consistía en el trabajo en favor de los pobres, los necesitados, y los ignorantes. Les presentaba con sencillez las bendiciones que podrían recibir, y de esa forma despertaba el hambre por la verdad, el pan de vida.--Consejos sobre la Salud, 384.

El servicio a la comunidad

Cada acto de misericordia en favor de los necesitados es considerado como hecho a Jesús--La religión pura y sin mancha delante del Padre es ésta: "Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha de este mundo". Santiago 1:27. Las buenas obras son los frutos que Cristo quiere que produzcamos; palabras amables, hechos generosos, de tierna consideración por los pobres, los necesitados, los afligidos. Cuando los corazones simpatizan con otros corazones abrumados por el desánimo y el pesar, cuando la mano se abre en favor de los necesitados, cuando se viste al desnudo, cuando se da la bienvenida al extranjero para que ocupe su lugar en la casa y en el corazón, los ángeles se acercan, y un acorde parecido resuena en los Cielos. Todo acto de justicia, misericordia y benevolencia produce melodías en el Cielo. El Padre desde su trono observa a los que llevan a cabo estos actos de misericordia, y los cuenta entre sus más preciosos tesoros. "Y serán míos, dice Jehová de los ejércitos, en aquel día cuando reúna mis joyas". Todo acto misericordioso, realizado en favor de los necesitados, y los que sufren, es considerado como si se lo hubiera hecho a Jesús.--Testimonios para la Iglesia 2:24.

Algunos ministros no pueden compadecerse de los pobres, necesitados e ignorantes--El corazón de Cristo se alegra al ver a los que son pobres en todo el sentido de la palabra; se alegra al ver a los que son mansos, a pesar de las vejaciones; se alegra por el hambre de justicia, al parecer insatisfecha, que algunos experimentan por no saber cómo cambiar. El recibe con agrado, por decirlo así, el mismísimo estado de cosas que desanimaría a muchos pastores. Reprende nuestra piedad equivocada dando la responsabilidad del trabajo en favor de los pobres y necesitados de los lugares difíciles de la tierra, a hombres y mujeres dotados de corazones capaces de compadecerse de los ignorantes y de los que andan descaminados. El Señor les enseña a estos obreros cómo relacionarse con aquellos a quienes desea ayudar. Se sentirán estimulados al ver que delante de ellos se abren puertas para entrar a lugares donde pueden realizar trabajo médico-misionero. Puesto que poseen muy poca confianza en sí mismos, le rinden toda la gloria a Dios. Puede ser que sus manos pueden ser ásperas e inexpertas, pero poseen un corazón susceptible a la piedad; los embarga el ferviente desea de hacer algo para aliviar la miseria tan abundante; y Cristo se halla presente para ayudarles. El obra a través de quienes disciernen misericordia en la miseria, y ganancia en la pérdida de todas las cosas. Cuando la luz del mundo pasa por algún lugar se descubren privilegios en todas las privaciones y aparece orden en la confusión; el éxito y la sabiduría de Dios se revelan en lo que había parecido un fracaso.--Consejos sobre la Salud, 26, 27.

Las relaciones públicas

La mejor forma de tratar con el error es presentar la verdad--La mejor forma de tratar con el error es presentar la verdad, y permitir que las ideas descabelladas mueran por falta de atención. Contrastada con la verdad, la debilidad del error resulta clara para toda persona inteligente. Cuanto más se repitan los asertos erróneos de los opositores, y de los que se levantan de entre nosotros para engañar a las almas, tanto mejor se sirve la causa el error. Cuanto mayor sea la publicidad que se da a las sugestiones de Satanás, tanto más se agrada a su majestad satánica.--Testimonios para los Ministros, 165.

Ninguna falsa presentación para obtener favor--No hemos de efectuar una falsa presentación de lo que profesamos creer a fin de obtener el favor de la gente. Dios aborrece las presentaciones falsas y las prevaricaciones. El no tolerará al hombre que dice y no hace. La mejor obra y la más noble es la que se realiza por una conducta justa y honrada.--El Evangelismo, 101.

Los medios de comunicación

Deje que los discursos importantes se publiquen en los periódicos--Los que lleguen a interesarse deben hacer frente a los sofismas y a la falsa presentación de los ministros populares, y no saben cómo contestar estas cosas. La verdad presentada por el predicador bíblico, debe ser publicada en forma tan condensada como sea posible, para hacerla circular ampliamente. Hasta donde sea practicable, publíquense en los diarios los discursos pronunciados en nuestras reuniones. Así la verdad que fue presentada ante un número limitado, puede hallar acceso a muchas mentes. Y donde la verdad ha sido tergiversada, la gente tendrá la oportunidad de conocer exactamente lo que el ministro ha dicho.--El Evangelismo, 100.