El Ministerio Pastoral

Capítulo 32

La reunión de oración

La iglesia debe orar a menudo--¡Jesús oró! ¡La Majestad del cielo oró! El lloró en favor del hombre. La oración, la oración ferviente y fiel moverá el brazo que mueve el mundo. El ministro de Cristo debe orar si espera tener la refrescante presencia de Dios. La iglesia debe orar mucho si desea caminar en la luz, así como él está en la luz.--The Signs of the Times, 15 de enero de 1880.

La reunión de oración es el pulso del cuerpo de la iglesia--Una reunión de oración siempre dirá el verdadero interés de los miembros de iglesia en las cosas espirituales y eternas. La reunión es como el pulso para el cuerpo; denota la verdadera condición espiritual de la iglesia. Una iglesia sin vida, que se está descarriando, no tiene gusto por las reuniones de oración.--Selecciones de los Testimonios para Administradores y Obreros de Nuestras Instituciones (Ph 149) 32.

Los miembros deben darle a la reunión de oración una mayor prioridad--Muchos declaran que no hay ciertamente mal alguno en ir a un concierto y descuidar la reunión de oración, o ausentarse de las reuniones donde los siervos de Dios han de presentar un mensaje del cielo. Es más seguro para vosotros estar donde Cristo dijo que él estaría. Los que aprecian las palabras de Cristo no se alejarán de la reunión de oración, o de la reunión donde el mensajero del Señor ha sido enviado para decirles cosas de interés eterno. Jesús ha dicho: "Donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos". ¿Podéis permitiros escoger vuestro placer y perder la bendición? La indulgencia en estas cosas tienen una marcada influencia, no sólo vuestra vida y carácter, sino en la vida y carácter de vuestros compañeros. Si todos los que profesan ser seguidores de Cristo fuesen así de hecho y verdad, tendrían la mente de Cristo, y obrarían las obras de Dios. Resistirían la tentación de complacer el yo y mostrarían que no disfrutan más de los frívolos placeres del mundo que del privilegio de encontrarse con Cristo en la reunión de testimonios. Entonces tendrían una decidida influencia sobre otros y los inducirían a seguir su ejemplo.--Mensajes para los Jóvenes, 138, 139.

Aquellos que realmente buscan comunión con Dios serán vistos en las reuniones de oración--Es necesario ser diligentes en la oración; ninguna cosa os lo impida. Haced cuanto podáis para que haya una comunión continua entre el Señor Jesús y vuestra alma. Aprovechad toda oportunidad de ir adonde se suela orar. Los que están realmente procurando mantenerse en comunión con Dios asistirán a los cultos de oración, serán fíeles en cumplir su deber, y ávidos y ansiosos de cosechar todos los beneficios que puedan alcanzar. Aprovecharán toda oportunidad de colocarse donde puedan recibir los rayos de luz celestial.--El Camino a Cristo, 98.

Las reuniones de oración resultan efectivas cuando cada uno de los asistentes se siente personalmente responsable de su éxito--Antes de salir del hogar, vaya a Dios en oración secreta. Ruéguele por su bendición, y él, que "ve en secreto, él te recompensará en público". Con un corazón enternecido por el amor de Jesús, vaya a la reunión sintiendo que es personalmente responsable de su éxito. Si son pocos los que asisten, usted se debe sentir con una doble responsabilidad, pues está en el servicio de Dios, y debe hacer lo que pueda con su talento, tacto y habilidad para hacer del culto de oración una bendición.--The Signs of the Times, 4 de diciembre de 1884.

La reunión de oración no debe ser tediosa, insípida y sin atractivo--Los cristianos no siempre dan la debida importancia a la adoración pública. No se dan cuenta de su responsabilidad en el asunto. La reunión de oración, en especial, a menudo es tediosa, insípida y sin atractivo. Pero no tiene que ser así. Aun cuando pocos aman la hora de oración, podría hacerse interesante y fructífera. La presencia de Jesús no está limitada a las grandes asambleas.--The Signs of the Times, 4 de diciembre de 1884.

Si la gente encuentra el Pan de Vida en las reuniones de oración, asistirán a ellas para recibirlo--Las reuniones de oración deben ser los cultos más interesantes que se tengan; pero con frecuencia son mal dirigidas. Muchos asisten a la predicación, pero descuidan la reunión de oración. También en este punto se requiere reflexión. Se debe pedir sabiduría a Dios, y se deben hacer planes para dirigir las reuniones de manera que sean interesantes y atrayentes. La gente tiene hambre del Pan de Vida. Si lo encuentra en la reunión de oración, irá para recibirlo.--Joyas de los Testimonios 1:458.

Los Testimonios

La reunión de oración puede ser considerada la más preciosa de todas las reuniones--¡Cuán profunda y seria importancia se adjudica a estas pequeñas asambleas! Jesucristo pagó el dinero del rescate con su propia sangre, por sus almas, y está en medio de ellos cuando se reúnen para adorar a Dios. La majestad del cielo identifica sus intereses con aquellos creyentes, y por humildes que sean las circunstancias y dondequiera tengan el privilegio de reunirse, es conveniente que a menudo se hablen unos a otros, dando expresión a la gratitud y al amor que resultan de pensar en el nombre del Señor. Así Dios será glorificado cuando escuche, y la reunión de testimonios será considerada la más preciosa de todas las reuniones.--Nuestra Elavada Vocacion, 170.

Las reuniones son interesantes cuando todos tienen algo que decir del Señor--El Señor me ha mostrado que los observadores del sábado deben prestar mucha atención a sus reuniones y hacerlas interesantes. Hay gran necesidad de manifestar más interés y energía en esta dirección. Todos deben tener algo que decir en favor del Señor, porque al hacerlo serán bendecidos. En un libro de memorias se escribe lo referente a aquellos que no abandonan sus asambleas, sino que hablan a menudo unos con otros. El pueblo remanente ha de vencer por la sangre del Cordero y la palabra de su testimonio. Algunos esperan vencer solamente por la sangre del Cordero, sin hacer ningún esfuerzo especial por su cuenta. Vi que Dios ha sido misericordioso al darnos la facultad del habla. Nos ha dado una lengua, y somos responsables ante él por el uso que le demos. Debemos glorificar a Dios con nuestra boca, hablando en honor de la verdad y de su misericordia ilimitada, y vencer por la palabra de nuestro testimonio mediante la sangre del Cordero.--Primeros Escritos, 114.

Los testimonios deben ser cortos y de naturaleza tal que ayuden a otros--La reunión de oración y de testimonios debe ser una ocasión de ayuda y estímulo especiales. Todos deben considerar como privilegio el participar de ella. Tenga cada uno de los que llevan el nombre de Cristo algo que decir en la reunión de testimonios. Estos deben ser cortos, y de naturaleza tal que ayuden a otros. Nada destruirá más seguramente el espíritu de devoción como que una persona dedique veinte o treinta minutos a un largo testimonio. Esto significa la muerte de la espiritualidad de la reunión.--Obreros Evangélicos, 180.

Las oraciones heladas y los testimonios largos arrojan una sombra sobre la reunión de oración--Temo que algunos no presenten sus dificultades a Dios en oración particular, sino que las reserven para la reunión de oración, y allí elevan sus oraciones de varios días. A los tales se los puede llamar asesinos de reuniones públicas y de oración. No emiten luz; no edifican a nadie. Sus oraciones heladas y sus largos testimonios de apóstatas arrojan una sombra. Todos se alegran cuando han terminado, y es casi imposible desechar el enfriamiento y las tinieblas que sus oraciones y exhortaciones imparten a la reunión. Por la luz que he recibido, entiendo que nuestras reuniones deben ser espirituales, sociales y no demasiado largas. La reserva, el orgullo, la vanidad y el temor del hombre deben quedar en casa. Las pequeñas diferencias y los prejuicios no deben de ir con nosotros a estas reuniones. Como en una familia unida, la sencillez, la mansedumbre, la confianza y el amor deben reinar en el corazón de los hermanos y las hermanas que se reúnen para ser refrigerados y vigorizados al juntar sus luces.--Joyas de los Testimonios 1:271, 272.

No se traiga un espíritu tedioso y quejumbroso a las reuniones de oración--Muchas oraciones y testimonios son tan carentes del Espíritu de Dios como una esponja seca sin humedad; porque no tienen a Jesús morando en sus corazones. Esto hace que la reunión de oración sea fría y sin vida, y no es sorprendente que los niños odien tales reuniones. No traiga un espíritu tedioso y quejumbroso a las reuniones de oración. No intercambie ideas para ver si puede contar la historia más triste. Hay suficiente de que hablar sin tener que levantar un sentimiento doloroso. Cuando estamos dispuestos a venir como niños, conscientes de nuestras propias debilidades, y deseosos de ser instruidos por el Divino Maestro, nuestros corazones serán llenos del amor de Jesús, y anhelaremos hablar de su incomparable valor. Cesaremos de hablar de nosotros mismos. Nuestras pruebas parecerán tan insignificantes que olvidaremos mencionarlas. Gozamos de muchas bendiciones. Cultivemos la gratitud, y hablemos de las bondades de Dios.--The Signs of the Times, 4 de diciembre de 1884.