El Ministerio Pastoral

Capítulo 37

El aconsejamiento

Los consejeros necesitan especialmente la mente de Cristo--Especialmente aquellos que aceptan puestos como directores o consejeros deben sentir que se requiere de ellos que sean cristianos en todo aspecto. Al tratar con otros debemos de ser fieles; no debemos ser rudos. Las almas con las que tenemos que trabajar son la posesión comprada por el Señor, y no hemos de permitir que se escape ninguna expresión impaciente de nuestros labios. Hermanos, tratad a los hombres como hombres, no como siervos, para ser manipulados a vuestro placer. El que se entregue a un espíritu severo y dominante, sería mejor que se torne en un pastor de ovejas, como lo hizo Moisés, y aprenda así lo que significa ser un verdadero pastor. Moisés ganó en Egipto experiencia como gobernante y como líder de ejércitos, mas no aprendió allí las grandes lecciones esenciales para la verdadera grandeza. Necesitaba una experiencia en tareas más humildes, para que pudiera llegar a ser un guardián con un tierno cuidado para todos los seres vivientes. Al cuidar de los rebaños de Jetro, demostró su simpatía a las ovejas y corderos, y aprendió a vigilar estas criaturas de Dios con el más tierno cuidado. Aunque con su voz nunca podrían haberse quejado de maltrato, su actitud podría haber demostrado bastante. Dios cuida a todas las criaturas que él ha creado. Al trabajar para Dios en su humilde puesto, Moisés aprendió a ser un tierno pastor para Israel.--Special Testimonies on Education 5:18, 19.

El pastor necesita entender una interminable variedad de temperamentos--Como el médico trata con la enfermedad física, así también atiende el pastor al alma enferma de pecado. Y su obra es tanto más importante que la del médico cuanto es la vida eterna más valiosa que la existencia temporal. El pastor tiene que vérselas con una interminable variedad de temperamentos; y es deber suyo llegar a conocer los miembros de las familias que escuchan sus enseñanzas, a fin de determinar qué medios ejercerán sobre ellos la mejor influencia para llevarlos en la debida dirección.--Obreros Evangélicos, 353.

La familia

La Palabra de Dios debe ser considerada como un consejero familiar--Los padres deben reformarse. Los ministros necesitan reformarse; necesitan a Dios en sus hogares. Si quieren ver un estado de cosas diferente, deben dar la Palabra de Dios a sus familias, y deben hacerla su consejera. Deben enseñar a sus hijos que ésta es la voz de Dios a ellos dirigida y que deben obedecerle implícitamente. Deben instruir con paciencia a sus hijos; bondadosa e incesantemente deben enseñarles a vivir para agradar a Dios. Los hijos de tales familias estarán preparados para hacer frente a los sofismas de la incredulidad. Aceptaron la Biblia como base de su fe, y por consiguiente, tienen un fundamento que no puede ser barrido por la ola de escepticismo que se avecina.--Historia de los Patriarcas y Profetas, 139.

No escuche los problemas privados y decepciones familiares de mujeres que se sienten atraídas a usted--Las mujeres se han sentido atraídas por UD., y se han visto inclinadas a comunicarle sus problemas privados y sus frustraciones familiares. No debería prestarles oído, en cambio, debería decirles que Ud. es sólo un mortal sujeto a error; que Dios es su ayudador.--Mente, Carácter y Personalidad 2:797.

Si una dama le manifiesta una atención indebida y se lamenta de que su esposo no la ama, no trate de suplir esa falta--Los que se destacan como ministros en el sagrado púlpito, deben ser hombres de reputación intachable; su vida debe ser sin mancha y estar por encima de todo lo que sepa a impureza. No hagáis correr riesgos a vuestra reputación yendo en el camino de la tentación. Si una mujer os retiene la mano, retiradla prestamente, y salvadla a ella del pecado. Si os manifiesta un afecto indebido y se lamenta de que su esposo no la ama ni simpatiza con ella, no tratéis de suplir esa falta. Vuestra única conducta segura y prudente en tal caso consiste en guardar vuestra simpatía para vosotros mismos. Los tales casos son numerosos. Señalad a las almas el que lleva las cargas, el verdadero y seguro consejero. Si ella eligió a Cristo como compañero, él le dará su gracia para soportar la negligencia sin quejarse; mientras tanto debe tratar de hacer cuanto pueda para atraer a su esposo a sí misma, por la más estricta lealtad a él, y la fidelidad en hacer agradable y atrayente su hogar. Si todos sus esfuerzos no tienen éxito y no son apreciados, tendrá la simpatía y ayuda de su bendito Redentor. El le ayudará a llevar todas sus cargas y la consolará de sus desilusiones. Ella manifiesta desconfianza en Jesús cuando busca objetos mundanos que suplan el lugar que Cristo está siempre dispuesto a ocupar. Con sus quejas, peca contra Dios. Sería bueno que examinara su propio corazón con espíritu crítico, para ver si el pecado no acecha en su alma. El corazón que busca así la simpatía humana y acepta atenciones prohibidas de parte de cualquiera, no es puro ni sin falta delante de Dios.--Joyas de los Testimonios 2:239, 240.

El dolor

El ministro ofrece esperanza significativa y especial a los que sufren--No puede haber dolor en la atmósfera del cielo. En el hogar de los redimidos no habrá lágrimas, ni cortejos fúnebres, ni indicios de luto. "No dirá el morador: Estoy enfermo: el pueblo que morare en ella será absuelto de pecado". Isaías 33:24. Nos invadirá una grandiosa ola de felicidad que irá ahondándose a medida que transcurra la eternidad.--Joyas de los Testimonios 3:433.

Aquellos que no muestran su dolor pueden estarlo sintiendo más profundamente. [Elena White habla de la muerte de la esposa de su hijo]--El pobre Willie está verdaderamente desolado. Nunca lo demuestra, así pues sufrirá solo y lo sentirá más profundamente. Mi corazón está dolorido y triste.--The Ellen G. White 1888 Materials, 678.

El sufrimiento puede hacer que el más fuerte se sienta abatido. [Elena White habla de la muerte de su cuarto niño, John Herbert, de tres meses de edad]--Cuando volvimos del funeral, mi casa parecía muy solitaria. Me sentí reconciliada con la voluntad de Dios, sin embargo, la melancolía y la tristeza se apoderaron de mí.--Testimonies for the Church 1:246.

El cristianismo trae una esperanza que se eleva por encima de todo sufrimiento. [Elena White habla de la muerte de su esposo]--No me voy a entregar a explosiones de pesar si mi corazón se quebranta. Sirvo a Dios no por impulso, sino inteligentemente. Yo tengo un Salvador quien será para mí una muy presente ayuda en tiempo de angustia. Yo soy una cristiana. Yo se en quien he creído. El espera de mí una sumisión completa e inconmovible. El pesar indebido le desagrada. He tomado mi cruz y voy a seguir al Señor plenamente. No me voy a abandonar al pesar. No me voy a entregar a un estado de morbidez y melancolía. No me voy a quejar de las providencias de Dios, ni voy a murmurar. Jesús es mi Salvador. El vive. Nunca me dejará ni me abandonará".--Cada Día con Dios, 302.

Las limitaciones

Los consejeros no han de erigirse en mente y juicio de otros--En lugar de actuar como sabio consejero, asume las prerrogativas de un gobernante exigente. Se deshonra a Dios cada vez que se exhibe semejante autoridad y exaltación propia. Nadie que confíe en su propia fuerza, ha de erigirse jamás en mente y juicio de alguien a quien Dios está usando en su obra.--Testimonios para los Ministros, 491, 492.

Los ministros podrán aconsejar pero búquese la sabiduría de Dios--En lugar de llevar sus perplejidades a un hermano o un ministro, lléveselas al Señor en oración. No coloque al ministro en el lugar de Dios. El ministro de Cristo es como cualquier otro hombre. Cierto, él lleva sagradas responsabilidades, pero no es infalible. Está lleno de flaquezas, y necesita gracia e iluminación divina. Necesita la unción celestial, para poder realizar su trabajo con éxito. Aquellos que saben orar, que saben cuales son las invitaciones del evangelio de Cristo, deshonran a Dios cuando echan sus cargas sobre hombres finitos. Siempre es bueno buscar consejo juntos; es correcto conversar juntos; es bueno presentar claramente las dificultades que aparecen en cualquier empresa delante de sus hermanos y sus ministros. Pero no dependa del hombre por sabiduría. Busque a Dios por la sabiduría que viene de arriba. Pida a sus colegas de trabajo que oren con usted; y el Señor cumplirá su Palabra, "Porque donde están dos o tres congregados en mi Nombre, allí estoy en medio de ellos".--The Youth's Instructor, 15 de febrero de 1900.

Los miembros no deben esperar que su ministro reemplace a Cristo como su guía y consejero--Muchos esperan que sus ministros les traigan la luz de Dios, y al parecer piensan que esto es más sencillo que tomarse el trabajo de ir ellos mismos a Dios por ella. Los tales pierden mucho. Si diariamente siguieran a Cristo y lo hicieran su guía y consejero, podrían obtener un claro conocimiento de su voluntad, y así lograr una experiencia valiosa. Por falta de esta experiencia, los hermanos que profesan la verdad andan a la luz de otros; no están familiarizados con el Espíritu de Dios, no conocen su voluntad, y por lo tanto se los puede apartar fácilmente de su fe. Son inestables, porque confiaron en otros para obtener una experiencia para sí. Se ha hecho amplia provisión para que cada hijo e hija de Adán obtenga un conocimiento individual de la voluntad divina, para que perfeccione el carácter cristiano, y se purifique por medio de la verdad. Los que profesan ser seguidores de Cristo deshonran a Dios si no tienen un conocimiento experimental de la voluntad divina ni del misterio de la piedad.--Testimonios para la Iglesia 2:569.