No actúe como vendedor en la casa de Dios--Me fue mostrado que si las facultades morales e intelectuales no han sido nubladas por hábitos equivocados de vida, los ministros y las personas hubieran sido rápidos en discernir los resultados maléficos de mezclar las cosas sagradas con las comunes. Hay ministros que han predicado desde el púlpito el más solemne discurso, y luego han distraído la mente de sus oyentes de las impresiones recibidas, y han destruido el fruto de su trabajo al introducir mercancías, haciendo el papel de vendedores, aún en la casa de Dios.--Testimonies for the Church 1:472.
Los ministros han de promover el trabajo misionero en todos los países--Nadie que haya dado su vida a la obra de Dios como ministro suyo, vive para sí. Su obra consiste en seguir a Cristo, en ser un agente y colaborador voluntario del Maestro, recibiendo su Espíritu día tras día, y trabajando como trabajó el Salvador, sin desmayar. Es elegido de Dios como instrumento fiel para promover la obra misionera en todos los países y debe considerar bien la senda en que anda.--Obreros Evangélicos, 466, 467.
Las publicaciones
Todos pueden ayudar la obra dando recursos para publicar revistas--No todos pueden ser predicadores de la Palabra en el púlpito. Las tareas individuales de las diferentes personas varían, mas hay trabajo para todos. Todos pueden apoyar a la causa dando de sus recursos para ayudar en los varios ramos de la obra, a fin de proveer recursos para la publicación de folletos y revistas para ser repartidas entre la gente, y diseminar así la verdad.--The Review and Herald, 9 de enero de 1883.
Las iglesias deben comprender que es su responsabilidad obtener suscripciones para nuestras publicaciones--Ahora contamos con grandes facilidades para esparcir la verdad, pero nuestro pueblo no se está poniendo a la altura de los privilegios concedidos. No en todas las iglesias se ve ni se siente la necesidad de usar las habilidades personales para salvar almas. No comprenden su deber de obtener suscripciones a nuestros periódicos, incluyendo nuestra revista de salud, ni de presentar nuestros libros y folletos.--MP, 409.
Algunos sienten que no pueden gastar en las publicaciones de la iglesia, pero si gastan en las publicaciones seculares--Entre los que profesan ser hermanos hay quienes no reciben [nuestras revistas], ... pero les llega uno o más periódicos seculares. Sus hijos se interesan intensamente en leer los cuentos de ficción y de pasión que se encuentran en esos periódicos, cuyo costo su padre puede pagar aunque asevera que no puede hacer frente al de nuestras revistas y publicaciones que contienen la verdad presente.--MP, 388.
Todas las familias deben tener la Revista Adventista, aun cuando la iglesia tenga que proveer las suscripciones a las más pobres--La Revista Adventista y Señales de los Tiempos son revistas baratas. La Revista Adventista es una revista valiosa; contiene temas de gran interés para la iglesia, por lo que debiera colocarse en todos los hogares de los creyentes. Si hay algunos demasiado pobres para comprarla, la iglesia debiera reunir el dinero necesario y suplirla a las familias necesitadas.--MP, 389.
La recolección
La recolección sigue el ejemplo de Nehemías, quien solicitó a los que no eran israelitas que podían dar--Me han llegado cartas preguntando lo que se aconseja con respecto al plan de la Recolección anual. En respuesta, voy a mencionar a todos el ejemplo de Nehemías. Cuando estaba por viajar a Jerusalén con la esperanza de restaurar las murallas de la azotada ciudad de sus padres, le dijo francamente al Rey Artajerjes el trabajo que esperaba realizar, y le solicitó su ayuda para asegurar el éxito de la empresa. Obtuvo una carta para el guardabosques del rey en las montañas del Líbano, instruyéndolo a suplir toda la madera necesaria para las murallas de Jerusalén, y los edificios que iban a ser construidos. Y los medios que le faltaban, los solicitó a quienes los podían donar.--East Míchigan Banner, 9 de septiembre de 1909.
La recolección puede ayudar a ambos: a las misiones y a ganar a la verdad a quienes dan--Según la providencia de Dios, los que han estado soportando la carga de su obra se han estado esforzando por poner nueva vida en métodos antiguos de trabajo, y también por inventar nuevos planes y nuevos métodos para despertar el interés de los miembros de la iglesia para que realicen un esfuerzo unido a fin de alcanzar al mundo. Uno de los nuevos planes para alcanzar a los incrédulos es la Campaña de la Recolección para las misiones. En muchos lugares durante los últimos años, esto ha demostrado ser un éxito, ha llevado bendición a muchos y ha aumentado los recursos que fluyen a la tesorería de la misión. A medida que los que no pertenecen a nuestra fe se han familiarizado con el progreso del mensaje del tercer ángel en las tierras paganas, se han despertado sus simpatías y algunos han procurado aprender más acerca de la verdad que tiene tal poder para transformar los corazones y las vidas. Hombres y mujeres pertenecientes a todas las clases han sido alcanzados y el nombre de Dios ha sido glorificado.--El Evangelismo, 187.