Mensajes Selectos, Tomo 3

Capítulo 41

¿Es correcto tener recordativos?

Recordativos de nuestra historia

Cuando Israel obtuvo victorias especiales después de salir de Egipto, se conservaron ciertos recordativos de estas victorias. Dios ordenó a Moisés y a Josué que hicieran esto mismo: edificar monumentos recordativos. Cuando los israelitas conquistaron una victoria especial sobre los filisteos, Samuel levantó una piedra conmemorativa y la llamó Eben-ezer, diciendo: "Hasta aquí nos ayudó Jehová". 1 Samuel 7:12.

¡Oh!, ¿dónde, como pueblo, están nuestras piedras conmemorativas?, ¿dónde están establecidas nuestras columnas monumentales grabadas con letras que expresen la historia preciosa de lo que Dios ha hecho por nosotros en nuestra experiencia? ¿No podemos nosotros, en vista de lo pasado, esperar nuevas pruebas y perplejidades adicionales--aun aflicciones, privaciones y tristezas--y no desmayar, sino que, mirando hacia el pasado digamos: "'Hasta aquí nos ayudó el Señor'? Yo encomendaré el cuidado de mi alma en manos del Todopoderoso como un fiel Creador. El guardará lo que yo le encomendé para que lo guardara para aquel día. 'Como tus días, serán tus fuerzas'". Deuteronomio 33:25.--Manuscrito 22, 1889.

Recordemos los tiempos pasados

El trato de Dios con su pueblo debe mencionarse con frecuencia. ¡Cuán a menudo levantó el Señor, en su trato con el antiguo Israel, los hitos del camino! A fin de que no olvidasen la historia pasada, ordenó a Moisés que inmortalizase esos acontecimientos en cantos, a fin de que los padres pudiesen enseñárselos a sus hijos. Habían de levantar monumentos recordativos bien a la vista. Debían esmerarse para conservarlos, a fin de que cuando los niños preguntasen acerca de esas cosas, les pudiesen repetir toda la historia. Así eran recordados el trato providencial y la señalada bondad y misericordia de Dios en su cuidado y liberación de su pueblo. Se nos exhorta a traer "a la memoria los días pasados, en los cuales, después de haber sido iluminados, sufristeis gran combate de aflicciones". Hebreos 10:32. El Señor ha obrado como un Dios realizador de prodigios en favor de su pueblo en esta generación. Es necesario recordar con frecuencia a los hermanos jóvenes y ancianos, la historia pasada de la causa de Dios. Necesitamos relatar a menudo la bondad de Dios y alabarle por sus obras admirables.--Testimonies for the Church 6:364-365; Joyas de los Testimonios 3:30-31.